Descubrí la tendencia sueca de la ‘limpieza de la muerte’ y cómo puede cambiar tu vida (¡y la de tus herederos!).
En Suecia, hay una tendencia sorprendente que está tomando fuerza: la “limpieza de la muerte”. No, no se trata de una nueva serie de terror, sino de una práctica que busca eliminar el desorden y facilitar la vida a quienes dejan atrás un legado. Magnús Magnusson, una autoridad en el tema, explica que la idea es no dejar una montaña de objetos acumulados que otros tengan que gestionar una vez que ya no estamos.
La “limpieza de la muerte” es una forma de abordar el desorden emocional y físico que acumulamos a lo largo de nuestra existencia. En lugar de esperar a que la vida nos sorprenda con un evento inesperado, como una mudanza o un cambio drástico, se invita a las personas a reflexionar sobre sus pertenencias y decidir qué es realmente útil y qué se puede dejar ir. Así, además de tener una casa más ordenada, se evita la carga emocional de algunas cosas que ya no tienen sentido.
Pero, ¿por qué esperar a que llegue ese momento crítico para vivir de esta forma? Dedicándose a hacer limpieza periódica, cada año, cada seis meses, o incluso más frecuentemente, se puede compartir la experiencia con amigos y familiares; una especie de fiesta de limpieza donde todos aporten y, en el camino, se diviertan. Con música de fondo y algunos snacks, limpiar puede convertirse en un evento social al estilo sueco, de esos que invitan a la risa y a la conexión.
Algunas personas ya están adoptando esta tendencia en Argentina, llevándola al siguiente nivel: organizando talleres y encuentros para aprender a gestionar el desorden en nuestras vidas. El hecho de que esta práctica también fomente la creatividad y el desapego emocional la convierte en un recurso valioso en un mundo donde el consumismo crece a pasos agigantados.
Por último, un dato curioso sobre la “limpieza de la muerte”: se dice que la mayoría de las personas acumula más de 100 objetos que nunca usará. ¡Imaginá lo que podrías hacer con ese espacio extra! Además, liberarte del desorden no solo tranquiliza tu mente, sino que también puede darle vida nueva a esos objetos al donarlos.
Así que, ¿te animás a hacer una limpieza de tu vida y evitar que tus herederos tengan que lidiar con tu legado desordenado? ¡Es hora de ponerse manos a la obra! La diversión está asegurada, y tu futuro (y el de quienes amás) te lo agradecerán.
Si no lidiamos con la montaña de objetos que acumulamos a lo largo de nuestra vida, ese problema le tocará a nuestros herederos.
Básicamente, "la idea es no dejar un montón de basura al morir. Basura de la que tendrán que hacerse cargo otras personas", le explicó Magnusson a BBC Mundo. " ...