Roma

En esta finca de 60 kilómetros cuadrados prosperan varios ecosistemas mediterráneos, como humedales, densos bosques de pinos y robles, y dunas de arena. Su ...

Ella y su equipo subdividieron la zona en unos 100 kilómetros cuadrados, asignando a cada una un valor específico en función del impacto de los jabalíes. Cree que sólo los cazadores, que pueden capturar decenas de jabalíes a la vez durante una braccata, pueden resolver el problema, y que se les debería permitir más autonomía para intervenir en las zonas protegidas. Sin embargo, Vitturi admite que este enfoque está limitado por la logística y los costes de inyectar manualmente a todas las hembras de jabalí una por una. La especie autóctona se recuperó después de la Segunda Guerra Mundial, cuando los bosques empezaron a recuperarse. Los investigadores compartieron algunas victorias: el Gobierno alemán, por ejemplo, ha eliminado decenas de jabalíes utilizando 400 de las trampas americanas que los investigadores italianos probaron en Castelporziano. Aquí, la población de jabalíes se ha duplicado en dos décadas hasta alcanzar el millón de animales. En la mayoría de las situaciones, la caza, o el control letal, no ha demostrado reducir la población del animal, e incluso puede estimular su reproducción. Sólo quedaban algunas poblaciones en la Toscana, el sur de Italia y los Alpes. Si a la propia sobrepoblación le sumamos el peligro de las infecciones por [peste porcina](https://www.irec.es/divulgacion-cientifica/jabalies-y-peste-porcina-africana/), lo que nos encontramos es con un problema de consecuencias imprevisibles. En medio del fuerte olor a jabalí mojado, barro y heces, uno de los investigadores anuncia con una sonrisa que la cría que sostenía se había orinado encima. Los animales viven en grupos familiares de diversos tamaños, generalmente formados por una o más hembras emparentadas y sus crías, además de otros juveniles. Con él trabajan esta tarde otros 10 científicos y expertos en fauna salvaje de toda Italia, deseosos de conocer nuevas intervenciones para frenar el avance de los jabalíes.